domingo, 8 de noviembre de 2009

¿Como moverse por Santiago?

Málaga 20-14 ºC
Santiago de Chile 22-4 ºC


Para moverse por Santiago, si es por turismo, lo mejor para distancias medias largas, es el taxi. No es caro comparado con España.

El metro tampoco es mala opción, pero siempre que no sea en hora punta (entradas y salidas del trabajo, o la pega, como dicen aquí), ya que la cantidad de personas que viajan a esas horas lo hacen muy desagradables. No tengo mucha experiencias en metro, pero en las ocasiones que he usado el de Madrid, no lo he visto tan masificado como el de Santiago.
Los andenes están repletos y puesto que es fácil empujar a alguien por accidente a las vías, hay unas líneas a 1 metro del borde y está prohibido traspasarlas hasta que el metro esté parado. Cuando para el metro y se abren las puertas, salen los que puedan salir, pero en la puerta hay una barrera de pasajeros. Si quieres entrar tienes que empujar a los que están en la puerta, que a su vez empujan a los de dentro. En la próxima parada te empujaran a ti para adentro. Para salir, como estés muy dentro, un par de paradas antes hay que ir moviéndose como se puede en el amasijo de personas pegadas cuerpo a cuerpo.


El uso de bicicleta, si es en las ciclovias que existen sobre todo en las comunas de Providencia, Las Condes (no se si en otras comunas hay. Ya dedicaré un capitulo a las ciclovias), es buena opción para desplazarse, pero convivir con el tráfico es suicida. O vas a la misma velocidad que los vehículos o te llevan por delante.

Para conducir en Santiago, hay que aprender y conocer una serie de cosas.
A los atascos se les llama taco, y en las horas puntas hay tacos tremendos. Sobre todo de 6 a 8 de la tarde. Hay incluso un programa de radio llamada la hora del taco, que se emite en ese horario.
Para conducir o manejar, como se dice en Chile, hay que estar con mil ojos, sobre todo en las horas punta. Como uses el intermitente para indicar un cambio de carril, inmediatamente hay alguien impidiendo esa maniobra, por lo que hay que ir cambiando sin avisar.
Hay que tener especial cuidado con los autobuses (se les llama micro), que son los dueños de la calle. Se cruzan, giran o hacen lo que sea sin importar si te llevan por delante. El motivo es que hasta hace poco, había distintas concesiones de autobuses urbanos y algunas rutas coincidían en tramos. Los conductores cobraban por viajeros, por lo que había competencia entre ellos para llegar antes a las paradas. Aunque ha cambiado el sistema de concesiones, se ve que las costumbres las han mantenido.


Hay señales de tráfico que son distintas respecto a España. No hay señal de dirección prohibida, sino que al llegar a un cruce, aparece el nombre de la calle o avenida, y las direcciones en las que se puede circular, pero también hay que saber que algunas avenidas, según la hora del día, cambia de dirección o bien todas las vías van en determinada dirección.
Al principio es confuso, porque llegas a una avenida, y no se sabe si se puede o no, y andas buscando si hay algún cartel que indique el horario de cambios de sentido, o sigues a todos los demás coches, por lo que al final acabas donde no quieres.
Con el tiempo aprendes los horarios y direcciones de las avenidas.
Otro punti a tener en cuenta, es la ubicación de los semáforos, que no están junto a la línea donde hay que pararse, sino justo enfrente, tras la calle que lo cruza, por lo que si quieres parar junto a él como en España, acabas saltándote un semáforo y quedando en medio de la carretera.

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